La Virtud de la Castidad y su Poder para Aliviar las Almas

inefables delicias al hablar con Jesús sacramentado

 


Ah ! Los santos han hallado siempre inefables delicias en hablar con Jesús sacramentado .

San Vicente de Paul le visitaba con la mayor frecuencia que le era posible y su descanso en medio de las graves ocupaciones que le rodeaban , era pasar largo tiempo junto al sagrario y es taba allí con tal humildad , modestia y devoción , que parecía que fuera materialmente la adorable persona de nuestro Señor Jesucristo .

Cuando le ocurrían negocios arduos , recurría como Moisés al sacrosanto tabernáculo para consultar al oráculo de la verdad : cuando salía de casa , iba á pedirle la bendición , y al volver le daba gracias por los beneficios recibidos , humillándose por las faltas en que podía haber incurrido .

San Luis sentía una satisfacción dulcísima en acompañar á su amado Je sus , y el salir de la iglesia era para él pena y dolor .

san Francisco Javier en medio de sus fatigosas tareas apostólicas recuperaba sus fuerzas pasando gran parte de la noche delante de Jesús sacramentado .

Esto mismo acostumbraba hacer san Francisco Regis , quien hallando alguna vez cerrada la iglesia se arrodillaba à la puerta de ella y así permanecía expuesto al agua y al frio para hacer la corte al menos desde lejos á su sacramentado Señor .

¡ Oh qué vastísimo campo para des ahogar la devoción ofrece un altar en que habita Jesús sacramentado

! Bien lo sabia aquella alma bendita , que preguntada por que estaba tantas horas delante de Jesús sacramentado , respondió ¡ Oh Dios ! ¿ Y no está allí la esencia de Dios , que hace en el cielo la bienaventuranza de los escogidos ? ¿ De aquel Dios , que arrebata en éxtasis de amor á todos los serafines ?

¿ Qué se hace visitando á Jesús sacramentado ? Se le ama , se le alaba , se le dan gracias , se le pide .

¿ Y qué hace un pobre cuando se pone delante de un rico , ó un enfermo delante de su médico , ó un se diento cuando encuentra una fuente cristalina , ó un hambriento cuando se sienta å una mesa opípara ? ¡ Ah ! Yo estaría junto á Jesús sacramentado por toda la eternidad .

Comentarios