con esto les ciega la pasión

 

 mujer que anda profanamente escotada, oyendo reprender este vicio, duda si es pecado grave, y por andar a su gusto atropella la duda. Otros particularmente en Castilla dudan. 

Las serpientes que envió Dios sobre los Israelitas en el desierto, dice San Isidoro ,eran tan sutiles que apenas las veían, cuando les picaban, y su ponzoña era tan activa que quitaba la vida casi tan pronto como se sentía, y de tal manera daban la muerte que sin tristeza del rostro perdía la vida todos los mordidos. Así sucede en mudanza. Si en los sábados pueden comer muchos pecados que se reputan por leves, y muchas veces quita la vida del alma, pero es porque no queremos entender su gravedad, como David, que no juzgó era tan grave su pecado de quitar la vida a Urias, por mirar por su crédito. 

Lo mismo les sucedió cuando hizo contar al pueblo. Por eso dijo el Espíritu Santo: (Prov. 14.) Este camino, que parece recto al hombre, al fin lo lleva a la muerte, que hay caminos que el hombre juzga verdaderos y son torcidos, que llevan al infierno. Esto sucede no pocas veces a los deshonrosos, a los presumidos e ignorantes, a los sensuales, porque ciegos con la pasión tienen por melindres y escrúpulos los que son peligros y pecados mortales; los presumidos y medio letrados se enredan mucho con su dictamen; y con razones no bien fundadas en la verdad, juzgan por pecado leve lo que es grave; los ignorantes por su corta capacidad no saben distinguir lo bueno de lo malo, y como Dios es fidelísimo, les hace conocer sus pecados, que no sea de grosería; también los casados dudan en el uso del matrimonio si son lícitas algunas acciones, y de esta manera muchos tienen diversas dudas de si es pecado mortal o no lo que obran, y atropellan por todo, y con eso cometen muchos pecados mortales, y aunque muchas veces se les ofrece ocasión de salir de la duda, preguntando a quien les sacará de ella, o cuando confiesan, pero lo dejan, porque se les propone el estorbo y vergüenza, que dirá si pregunto esto? ¿Qué parecerá cierto? Y les vence, y dicen que no será pecado, con esto les ciega la pasión, se quedan en sus dudas, atropellan por ellas, cometiendo nuevos pecados, y no arrepintiéndose, y perseverando en las dudas hacen malas confesiones.